viernes, enero 27, 2006

Separación

La distancia que me separa de la puerta
parece un patíbulo.
Me alejo como un sonámbulo
que desea un perdón
que no llega.

Ningún ángel grita.

Ningún dios se apiada.

2 comentarios:

UMA dijo...

Sin embargo habìa dos enamorados que lloraban mientras sonreìan...
y viceversa, claro.
Saludos, Carz.
Un abrazo.

Carz dijo...

La recuerdo al otro lado del cristal. Parecían dos adolescentes diciéndose sin voz "te amo". Él presintió que lo observaba mientras subía al avión, y eso le hizo bien: ella lo sabe. Ya te lo dije: la ausencia es la frontera entre dos encuentros... en eso creo, y en vos, claro.

Besos