
Inútil corazón tullido
embárrate en tu sangre
y fabrica adobe de tu arena
y la broza de tus nervios.
Desángrate ya:
mañana será tarde
-sólo habrás ganado
un día de penumbra,
más huellas borradas por un viento
que voraz devorará lo indevorable-
Colapsa tu latido:
tu pulso destruye las paredes
que soñaste
fueran tu sudario.
2 comentarios:
Recordando las palabras de Yeats: una belleza terrible.
Palabras a corazón abierto, dolor a manos llenas. Pero el corazón es un gran superviviente, tanto que a veces puede parecernos que soporta más de lo necesario...¿cómo lo hará?
Abrazo con corazón.
Supongo que lo hace aferrándose al impulso atávico que impulsa a la vida del carbono a mutar y evolucionar.
Y también puede que confíe en que el destino incierto pueda dar un giro inesperado, lo que llamo metaesperanza.
Un abrazo.
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